Josep María Coll i Alemany nació en Barcelona el año 1934 en el seno de una familia culta, vinculada a la catalanidad y de arraigada fe cristiana. Fue catedrático de metafísica, dedicándose preferentemente a la hermenéutica y materias afines durante más de veinte años, e impartiendo sus enseñanzas en la Facultat Eclesiàstica de Filosofia de Catalunya, de donde fue decano durante 12 años, entre otros centro. Fue uno de los fundadores de la Universitat Ramón Llull a principios de los 90. Se diplomó también en Psicología Clínica por la Universidad Complutense de Madrid en 1964 y se licenció en Teología por la Universidad de Innsbruck en 1966. En 1965 fue ordenado sacerdote e ingresó en la Compañía de Jesús.
Entre las numerosas responsabilidades y cargos que asumió, y las instituciones a las que se adhirió, diremos que presidió el Institut d’ Estudis Humanístics Miquel Coll i Alentorn (su padre), entre los años 1996 y 2007, formó parte de Consejo Asesor de la Fundació Joan Maragall de Cristianisme i Cultura, así como de diversas revistas especializadas en teología y filosofía (Comunió, Pensamiento…) y miembro del Istituto Internazionale Jacques Maritain de Roma y la Societat Catalana de Filosofia (Institut d’ Estudis Catalans, en el GFP). En el 2014 recibió la distinción Jaume Vicens Vives a título individual, siendo ya profesor emérito de la Facultad de Filosofía de la Universidad Ramón Llull (URL).
Como prueba de su valioso trabajo, merece mención especial su tesis doctoral: Filosofía de la relación interpersonal(1988), editada en dos volúmenes por el PPU en 1990. Posteriormente, un resumen de esta tesis doctoral quedó reflejada en el Anuari de la SCF. Cabe decir que la tesis suscitó discrepancias entre algunos filósofos. Por ejemplo, en enero de 1991 el Dr. Sales afirmaba, entre otras consideraciones, que la relación interpersonal fundaba la filosofía del pare Coll y no al revés.
Otras obras dignas de mención, que merecen ser señaladas:
- La relación interpersonal, obra editada por la Fundación Emmanuel Mounier. Madrid, 2010. Colección Persona nº 33, con prólogo de Carlos Díaz. Es un resumen en formato reducido de 212 páginas de su tesis doctoral.
- El personalismo dialógico. Estudios 1. Fundación Emmanuel Mounier. Madrid, 2011. Colección Persona nº 38. En sus 156 páginas se recoge una síntesis de los principales trabajos sobre personalismo del padre Coll.
- La teología y la filosofía a la búsqueda de su unidad. Estudios 2. Fundación Emmanuel Mounier. Madrid, 2012. Colección Persona nº 42. Nuevamente, en 158 páginas amplía la anterior síntesis de los estudios más relevantes del pare Coll.
- ¿Intersubjetividad o Interpersonalidad? Estudios 3. Fundación Emmanuel Mounier. Madrid, 2013. Colección Persona nº 48. Mediante 167 páginas se completa su perspectiva filosófica.
- La revista Calidoscopi nº 30, en la sección La entrevista (diciembre de 2011, páginas 79-81) recoge un largo e interesante estudio sobre el personalismo del pare Coll en una entrevista que le realiza Albert Llorca para la revista del IEMC, divulgadora del pensamiento y valores personalistas, de la que el pare Coll, miembro de la institución, era colaborador.
La contribución del padre Coll al personalismo fue inmensa. De los autores con los que departía en el ámbito personalista cabe mencionar a Eusebi Colomer, Jaume Bofill, Pere Lluís Font…, personas muy cercanas a sus inquietudes intelectuales y vitales.
Como teólogos de gran prestigio admiraba a Karl Barth, conocido por su actitud contra la escolástica católica racionalista, y Henry Lubac, pensador que se dedicó a retomar aspectos de teología abandonados por la reflexión preconciliar.
Señalaremos que las fuentes filosófico-teológicas de Karl Rahner también le interesaron al pare Coll, en especial la perspectiva de la filosofía transcendental kantiana que llegó hasta Heidegger. El papel de Karl Rahner fue decisivo en el Concilio Vaticano II, hasta el punto de ser considerado padre del mismo. Rahner valoraba “la Gracia” como fundamental, pues consideraba que la persona humana no es nunca “natural”.
Rino Fisichella, profesor de Teología fundamental en la Pontificia Universidad Gregoriana, y uno de los colaboradores de Juan Pablo II en la preparación de la encíclica Fides et ratio, también le era próximo en pensamiento, así como Hans Urs von Balthasar, cuando sugiere la relación mutua entre fe y razón que apunta Coll en sus escritos. Przywara y G. Siewerth también le afectan en cuanto vislumbran un progreso en la profundización de este tema tan decisivo y delicado.
Finalmente, mencionar a Ferdinand Ebner, filósofo que incide en la implicación mutua o integración entre la fe y la razón, que comparte, y Ferdinand Ulrich, que con su “Metafísica de la evolución” pretende, como el pare Coll, no contraponerse al devenir, sino incluirlo.
El pare Coll falleció en el otoño de 2017. Pocas figuras de la intelectualidad catalana serán tan recordadas y queridas como él.
Albert Llorca Arimany